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Sandrine Reynaud nació en Valence (Francia), pero lleva media vida trotando por el mundo. Desde 2022 reside en Panzano, una localidad de 25 habitantes perteneciente al municipio de Casbas de Huesca, en la comarca Hoya de Huesca. Antes vivió en Biscarrués, Ayerbe y en Azlor, en la comarca del Somontano. Ama los pueblos con historia, con piedras y caminos. Aragón entero, dice.
Sandrine es escultora. La piedra le llevó a la escalada y la escalada a la escultura. Fue en los años noventa, viviendo en Isla Reunión, cuando descubrió el basalto y decidió cambiar los pies de gato, la cuerda y la magnesera por los cinceles, las gradinas y los discos de corte. Es autodidacta. Le importa el elemento; la piedra, su energía e historia.
Esculpe, hace instalaciones y trabaja in situ en la naturaleza. La interviene con respeto, sin invadirla, dejándola respirar y devolviéndole su protagonismo. Eso es lo que se propuso conseguir en 2017 cuando puso en marcha el proyecto cultural transfronterizo “Muretes de arte”. Una preciosa iniciativa que busca revalorizar el patrimonio cultural recuperando e interviniendo viejos muros de piedra seca con ayuda de artistas y vecinos de diferentes pueblos tanto aragoneses como franceses.
Sandrine comparte taller (Martillazos, se llama) con su pareja, el herrero y escultor Paco Puch. Él trabaja el hierro forjado y ella la piedra esculpida. Ambos forman parte del colectivo Aquí hay Arte 22800, un grupo de artistas de la Hoya de Huesca que, tomando prestado el código postal de Ayerbe, han montado un espacio creativo y colaborativo en la localidad para visibilizar el potencial artístico de la comarca y demostrar que el arte puede ser accesible y asequible para todas.
Participa en charlas y simposios e imparte talleres de escultura, instalación en piedra seca e iniciación al grabado los fines de semana. No se siente condicionada como mujer y creadora del medio rural, pero reconoce el esfuerzo constante que debe hacer para vestir como contemporáneas obras realizadas en piedra. Siendo éste ya de por sí un elemento bastante añejo.
Sus piezas están diseminadas por caminos, parques y jardines de numerosos municipios aragoneses, pero también en pequeñas galerías de arte francesas y españolas. “Huellas de Piedra” (Graus), “Arte en el Jardín” (Ayerbe), “Presencias” (Monzón) y “Piedras Reveladoras” (Huesca) son algunas de las exposiciones que ha realizado en los últimos años.